La psicología en la publicidad es fundamental si deseamos impactar en nuestro público objetivo. A través de la misma, es posible despertar emociones y sentimientos para conseguir que la audiencia que ve un anuncio sobre nuestro producto/servicio, realice alguna acción, preferiblemente de compra.

Para que puedas entenderlo de forma fácil haremos un pequeño ejercicio. Piensa en un anuncio que te haya emocionado ¿Lo tienes? Bien, pues todo lo que te transmitió no fue casualidad, sino que era exactamente lo que este quería hacer. Todo está pensado de principio a fin: el momento determinado que se publica, la duración y lo que desea transmitir con su mensaje.

Desde Elio Estudio, nuestra agencia de publicidad en Sevilla, vamos a explicar punto por punto en qué consiste exactamente la psicología en la publicidad.

¡Sigue leyendo porque te aseguramos que es un tema muy apasionante! 😉

La psicología en la publicidad

El objetivo principal de la psicología publicitaria como bien hemos comentado al principio de este post es impactar al público objetivo para que este realice una compra o haga uso de un servicio, pero ¿Cómo lo consigue?

Analizando minuciosamente el impacto que tiene la publicidad en la audiencia, es decir, en las personas, estudiando las características y difusión de esta publicidad y así, extraer conclusiones, como por ejemplo: qué colores impactan más, qué tipografía funciona mejor, que mensajes funcionan entre otros aspectos.

Gracias a dichas conclusiones, los psicólogos publicitarios pueden detectar los hábitos de consumo de los usuarios, estableciendo estrategias que servirán para crear y diseñar campañas publicitarias futuras.

Por ello, la psicología en la publicidad es tan importante porque gracias a ella se puede comprender los valores en los que se basan los consumidores a la hora de adquirir un producto o servicio.

A continuación veremos 4 estrategias que se utilizan en la psicología publicitaria:

Repetición

Que un anuncio sea repetitivo puede ser un arma de doble filo, ya que pueden ocurrir dos cosas. Por un lado, que un usuario se canse y termine odiando a la marca o que acabe comprando. Repetir constantemente un anuncio o eslogan es una buena manera de tener visibilidad y estar presente en la mente del consumidor.

Un ejemplo de ello es el anuncio de Jazztel ¿Quién no se sabe la melodía de este anuncio y su eslogan «Deja que Jazztel te toque la fibra»?

Persuasión

La persuasión es muy importante en la psicología publicitaria, ya que es aquella acción que desea establecer un producto/servicio por encima del de sus competidores. Para conseguirlo, realza los atributos, beneficios y mejores características de estos en comparación a los de sus competidores.

En este anuncio de Vanish podemos ver como la marca compara su resultado con el de una marca blanca.

Proyectiva

El producto se presenta a usuarios que les pueda interesar, es decir, que encaje con su estilo de vida, gustos, cultura etc. En este spot de Decathlon que te dejamos a continuación, podemos ver claramente cómo va dirigido a personas que les gusta el deporte.

Sugestiva

Por último, este tipo de publicidad se basa en técnicas psicoanalíticas. Podríamos decir que son anuncios que presentan situaciones en las que el público tiene un problema como por ejemplo, dolor de espalda como en este anuncio de ThermaCare para después venderles un producto que lo solucione.

En definitiva, podríamos decir que gracias a la psicología publicitaria, es mucho más sencillo crear campañas que funcionen y generen un gran impacto en el consumidor.

Esperamos que te haya gustado este post sobre «La psicología en la publicidad» y que a partir de ahora analices los anuncios que veas tanto en televisión como en internet.

¡Nos vemos en el siguiente artículo!

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