De las 4 P a las 4 C del marketing

las 4 C del marketing

las 4 C del marketing

El marketing se ha sustentado desde el principio en cuatro pilares básicos: las 4 P. Estas son Producto, Precio, Place (Lugar) y Promoción (Publicidad). Sin embargo, con el paso de los años y la modernización de la publicidad y el marketing, estas siglas han derivado en una nueva definición. Debido al cambio de las estrategias del marketing, las 4 P se han convertido en las 4 C del marketing. En este nuevo modelo el protagonista es el cliente, por lo que todo gira a su alrededor, reconduciendo las estrategias de marketing a sus deseos.

El concepto fue acuñado por el profesor Robert Lauterborn. Quien entendió la evolución del marketing basándose en los puntos fundamentales de cualquier tipo de estrategia.

Mientras que en el concepto de las 4 P, el valor se lo dábamos al producto, en las 4 C el valor se lo damos al cliente. Nos importa qué beneficios y deseos puede satisfacer. La orientación se centra en el cliente potencial y no en el producto. Este nuevo concepto se basa en generar una relación, un diálogo con el cliente; dejando de ser un mero receptor del producto.

Pero, ¿a qué nos referimos con las 4 C del marketing? ¿Qué o quién compone este concepto? La respuesta es la siguiente: Consumidor, Costo, Conveniencia y Comunicación.

La intención no es vender cualquier cosa que se produzca, sino estudiar al cliente, los deseos y necesidades del consumidor.  Debemos entender al cliente para poder realizar un producto beneficioso para él, ya que es el consumidor quien toma la decisión de compra.

Es importante distinguir entre costo y precio. El precio es un pequeño porcentaje que paga el cliente. Mientras que el costo es el total de los factores que influyen en el producto para el cliente. En este caso, no solo tenemos en cuenta el precio del producto, sino también el tiempo que tardará el cliente hasta llegar a la ubicación del producto,  o el esfuerzo que el cliente realiza para adquirirlo. Ahora lo que importa es que el costo total sea más bajo, no el menor precio.

En este caso se le da la importancia a la distribución de los productos en los lugares más convenientes para el cliente. El cliente adquiere el producto en el lugar más accesible, es decir, donde más le conviene. El objetivo es  hacer un producto rentable y simple de obtener.

Está orientada al cliente para poder vender los productos. Se debe tener muy en cuenta la opinión del consumidor, la relación que establece con los productos. Para poder diseñar promociones que sean útiles y que atraigan a los clientes, hay que escucharles y saber qué es lo que quieren y lo que opinan. La comunicación requiere interacción entre el vendedor y el consumidor. En este caso las redes sociales son fundamentales para crear ese vínculo y establecer un enlace que les haga interactuar.

Cualquier estrategia de marketing debe estar basada en los pilares de las 4 C del marketing, para posteriormente poder generar un buen Plan de marketing. Obligando de cierta forma a estudiar y conocer a la audiencia del producto y estableciendo una comunicación beneficiosa para ambos durante todo el proceso.